Esta semana, los precios promedio de las categorías de machos y jóvenes comercializadas en el mercado de Liniers superaron en 6-9% los de la previa y el mayor aumento fue para los novillos. En dos semanas, los incrementos se ubicaron 13-15% arriba, a pesar de la abundante oferta ingresada por tercera semana consecutiva.
Las vacas no pudieron seguir el mismo ritmo, marcando una caída del 2% en una semana y del 1% en dos. En esta oportunidad también el precio de hembra adulta comenzó a marcar la curva estacional, que va a ir recorriendo un camino de reducción en relación al precio del novillo, como sucede con cada inicio del verano.
En cuanto a la oferta, tras dos semanas de ubicarse en +10-15% sobre el promedio semanal del último año, los ingresos de los últimos cinco días hábiles representaron un nivel de más de 40% por encima de esa variable.
En la comparación con los valores de 30, 60 y 90 días atrás, para machos y jóvenes se aprecian aumentos de 15-16% en un mes, de 30-33% en dos meses y de 35-38% en tres. Las vacas tuvieron un comportamiento diferente, mostrando aumentos de 6, 13 y 20% en el mismo orden.
El precio real del novillo, en alza
Consecuentemente con los movimientos descriptos, la cotización del novillo ajustada por inflación general, se ubicó 11% por encima de la trayectoria de los promedios móviles de un año y nada menos que 35% por encima del valor de hace un año. Significa que, en términos nominales, el novillo aumentó el 104%. Resulta notable en un contexto de alta inflación, que supera al 50% anual, y de debilidad del mercado interno.
Con el registro de esta semana, el precio real alcanzó al último pico de mediados de febrero pasado, tras el raid de precios que se inició en la Navidad anterior, como se puede ver en el gráfico siguiente.
Algunos comentarios
La inminencia de las Fiestas explica la firmeza de la demanda, con operadores que no quisieron fallar en la oferta a sus clientes. Aunque muchos sabrán que no podrán volcar en el mostrador los costos adicionales, habiendo preferido operaciones deficitarias antes que tener la heladera vacía.
También el hecho de que los dos miércoles sucesivos de feriados que se vienen, con todo el trastocamiento que provocan en el movimiento de haciendas y de trabajo en los frigoríficos, aumentaron la presión de la demanda.
