Comenzó el nuevo año y también nosotros comenzamos con el análisis de los mercados relacionados a la Cadena de Valor de la carne Bovina. Como es costumbre nos focalizamos principalmente en las relaciones de precios entre las categorías con destino a abastecer las canales de comercialización de carne y las categorías que abastecen a los dierentes centros y tipos de sistemas de engorde.
Como se puede observar en el gráfico precedente, las relaciones de precios entre el ternero con destino invernada y los novillitos con destino a faena para el año 2017 se encontraron alineados casi de manera idéntica a los correspondientes al promedio de la misma relación para los últimos 13 años. De la misma manera como se observa para el mes en curso, la relación se encuentra apenas por encima (1,32) al promedio de la serie para el mismo mes (1,30), ubicándose prácticamente en el mismo nivel que el registrado en el mes de Diciembre (1,33).
Con respecto a los precios de cada categoría, vemos como es habitual que las destinadas a faena tuvieron su mayor recuperación de precios durante la primera mitad del año para luego estabilizarse en el tercer trimestre y retroceder en el cuarto. Por su parte las categorías con destino a invernada mostraron en 2017 el comportamiento esperado según la dinámica de precios observada desde ya hace varios años, con precios estables durante la primera mitad del año, consecuentemente con el período de la zafra, para luego recuperarse fuertemente durante la segunda mitad a partir del mes de julio en adelante.
Como era de esperarse para el mes en curso se produjo una caída importante de los precios de las categorías de invernada del orden 6,5% que si se añade la baja registrada en el mes de Diciembre suman un retroceso para los precios de esta categoría cercano al 9,5% (respecto de los máximos del mes de noviembre). Para el año 2016 el máximo de precio para los terneros se dio en el mes de Septiembre registrándose un retroceso en los meses subsiguientes (hasta enero de 2017) del orden del 10,2%.
Para el caso de los novillos con destino faena en el 2017, la particularidad que observamos fue la baja retracción de los precios en el último trimestre luego de las subas de la primer mitad del año. No obstante en el mes en curso se ha registrado un retroceso importante del orden del 5%.
Cabe aclarar que los “Eneros” no son buenos indicadores debido a la merma que existe en las operaciones de los mercados debido a las conocidas condiciones estacionales, no obstante, cuando uno habla con operadores de mercado los mismos nos describen un clima de negocios bastante frío que se contrapone con los calores que suelen sentirse a estas alturas del verano.
Quizá las categorías más perjudicadas y las que en mayor medida reflejan esta situación sean los vientres. Las vaquillonas con garantía de preñez muestran una caída de los precios del orden del 13,6% y peor aun las vacas con garantía de preñez que retroceden un 17% respecto del mes de Diciembre. Esta última categoría muestra valores nominales apenas 6% superiores a los registrados hace exactamente 2 años atrás.
Más allá de todo lo comentado, reforzamos lo antedicho respecto del mes de enero y lo poco representativo que suele ser este mes en la dinámica del negocio. Así coinciden los operadores consultados que aseguran que ya desde la próxima semana y una vez que empiece a transcurrir el mes próximo los valores se irán acomodando de acuerdo a las buenas expectativas que siguen existiendo para nuestro sector. Habrá que esperar para ver lo que acontece, primero, al finalizar las vacaciones, etapa que coincide con un alza estacional de los precios de la carne (y las categorías con destino a faena), y en segundo lugar, con los precios de las categorías de invernada a medida que transcurra la temporada de zafra. Al respecto ya hay estimaciones que arrojan entre 500 y 700 mil terneros mas para esta temporada de destetes.
Publicaciòn de «Decisiòn Ganadera» de fecha 22/01/2018