El estudio Elizalde & Riffel analizó en un boletín anterior de Valor Carne los márgenes de diferentes planteos de recría-terminación, concluyendo que todos se vieron muy impactados por los efectos derivados de pandemia, debido a que el precio del ternero aumentó un 35% desde marzo a julio, superando al tipo de cambio, mientras que la hacienda gorda lo hizo en un 4 a 5%. Esta distorsión está relacionada con la incertidumbre económica que llevó a los productores a tomar coberturas y quedar calzados en hacienda, buscando un «resguardo de valor».
En esta nueva entrega, el objetivo es identificar el precio del novillo al momento de la terminación (marzo, mayo y julio de 2021) que permita igualar el resultado proyectado al inicio de esta zafra (marzo 2020), habiendo pagado el ternero a los valores de marzo-mayo y julio 2020. En concreto, se analizará si la hacienda funciona realmente como resguardo de valor para los empresarios, ante la volatilidad de los tiempos que corren.
Los modelos
Se analizaron tres sistemas de recría-terminación. Uno hace recría en campo bajo mejorado con promociones de raigrás y terminación a corral. Otro recría en campo de loma, sobre pasturas de alfalfa, hasta los 320 kg y termina a corral con 440 kg de peso vivo (410 kg netos). El tercero recría a corral con silo de maíz hasta los 300 kg y luego sigue con ración de terminación hasta los 410 kg (390 kg netos).
El tipo de cambio
Para calcular un precio del novillo que permita equiparar el margen 2020, se tuvo en cuenta la variación del tipo de cambio a lo largo del ciclo productivo de cada sistema. En ese sentido, al inicio de la zafra de este año, el dólar oficial cotizaba a $67,76 y a mediados de julio ascendió a $75,21. En tanto, la estimación del valor del novillo en dólares y en pesos, a marzo, mayo y julio 2021, surgió de la evolución del dólar futuro (Rofex) al 24/8/2020.
Tal como muestra el gráfico, en abril 2021, uno de los meses en que se prevé la venta de los novillos, el dólar rondará los $99,3. Si tomamos la diferencia con respecto al tipo de cambio a la misma fecha de este año, la suba sería del 46,5% ($99,3 vs $67,76, respectivamente).
Qué precio debe alcanzar el novillo 2021
Retomando los datos del estudio publicado anteriormente, se puede ver la caída cada vez más acentuada de los resultados económicos que presentan los modelos de recría-terminación durante este 2020, desde marzo en adelante.
Sobre esta base, se calcularon los precios (en pesos y dólares) que debería alcanzar el novillo gordo en marzo, mayo y julio 2021 para obtener un margen bruto similar al de marzo de este año (momento en que empezó a aumentar el ternero) teniendo en cuenta, como se dijo, la relación entre el peso y dólar a lo largo del ciclo productivo de cada sistema.
Según se observa en el cuadro, las empresas que compraron terneros al inicio de la zafra (marzo-abril) necesitan lograr un precio de venta menor respecto a las que lo hicieron más tarde (mayo y julio), dada la suba de la categoría para invernada (14,4% en u$s) desde marzo a julio de este año.
En síntesis, quienes hayan comprado invernada temprano tienen más chances de vender los novillos a los precios de indiferencia ($156-162/kg vivo) para mantener la reserva de valor a través de la hacienda. En contraposición, los que la hayan comprado en julio 2020 requieren un precio de venta mayor ($177/kg vivo y $184/kg vivo para novillos de 410 kg y 390 kg, respectivamente, a julio 2021), para lograr esa premisa. Es decir, que el porcentaje requerido de aumento en el gordo, tomando como base el precio de hoy ($110/kg vivo), varía entre el 41,8 y el 67,3%, según la fecha de compra, como se muestra seguidamente.
Para reflexionar
De cara a los próximos meses, habrá que ver si el novillo, que está muy retrasado con respecto al ternero, es capaz de recuperarse y generar un margen similar al de este año. Esto se cumplirá siempre y cuando el dólar futuro esté a $99,3 y $106,5, en abril y julio 2021, respectivamente, ya que si vale más, ese objetivo no se logrará. Recién entonces, podremos saber si la compra de terneros caros, que ocurrió a partir de mayo en adelante, sirvió realmente como refugio de valor.
Por otra parte, si analizamos la variación de precios de los últimos diez años, desde enero de 2010 hasta julio 2020, se puede observar que tanto el ternero de invernada como el novillo tuvieron un aumento mayor respecto al tipo de cambio.
Esto es alentador cuando analizamos un período largo de tiempo, pero surge el interrogante acerca de si el novillo gordo será capaz de mantener esta tendencia durante un ciclo tan complejo y con tanta volatilidad económica con el 2020-2021. Se requieren aumentos importantes en esa categoría como para equilibrar la compraventa y que el negocio funcione como cobertura. No es poco.
Por: Ing. Agr. Juan C. Elizalde, Ph.D.
Ing. Agr., M. Sci. Sebastian L. Riffel
Publicación de «Valor Carne» de fecha 10-09-2020