El Ojo del Amo SRL es una startup rosarina que desarrolló Alerta ITH, un sistema de alerta temprana y mitigación del estrés calórico que mejora al bienestar animal, la productividad y el resultado económico del feedlot. El M.V. Adolfo Silveyra, Director de la Cátedra de Nuevas Tecnologías en Producciones Pecuarias de la Universidad Nacional de Rosario y CEO de la firma, explica los detalles de esta tecnología pionera en el país y clave ante un escenario cada vez más afectado por eventos climáticos extremos.
«Las olas de calor son más frecuentes y producen pérdidas de 10 a 20% en la ganancia de peso diaria y en la conversión alimenticia. Los aumentos de la tasa metabólica y respiratoria del animal llevan a la disminución del consumo, que se recupera recién dos semanas después», dijo Silveyra, presentando datos de Terry Mader, investigador de la Universidad de Nebraska, USA, y referente mundial en el impacto del clima en la producción ganadera.
¿Cómo se mide el estrés calórico en el feedlot? El Índice de Temperatura y Humedad (ITH) es el más utilizado para monitorear si las condiciones ambientales resultan estresantes para la hacienda. En tal sentido, valores de ITH ≥ 75, constituyen un alerta (leve); ≥ 79 un peligro (moderado) y ITH ≥ 84 una emergencia (severo).
«Si bien el productor dispone de esta información, a través del INTA, los datos se recolectan a muchos kilómetros de su campo. O sea que es una guía importante, aunque no refleja con exactitud lo que ocurre en los corrales. También podría tomar él mismo la temperatura y humedad in situ, pero la fórmula del índice no es sencilla y le llevaría mucho tiempo hacer las cuentas. Por eso, nuestro sistema, Alerta ITH, captura los datos en tiempo real mediante sensores colocados en el establecimiento, los sube a la nube y simplifica el cálculo mediante el lenguaje digital», planteó.
Otro diferencial importante es que el nivel de ITH se visualiza al instante en una App de un celular, una notebook o una PC de escritorio. Aparece un semáforo que muestra el color verde, amarillo, naranja o rojo, indicando desde la situación normal hasta la emergencia, según la escala universal del índice. ¿Quiénes reciben el alerta? «Se asignan los usuarios que determine el dueño del feedlot y que tendrán acceso a la información. O sea que lo puede ver simultáneamente por ejemplo un empresario que está en la cuidad, el encargado del feedlot y el veterinario», respondió.
Esta advertencia permite que el establecimiento tome medidas preventivas ante el estrés calórico, como cambio de dieta, horario de suministro o realización de determinadas prácticas. El sistema también brinda un boletín permanente de alerta meteorológico, que no es online, pero sí tiene una modelización que anticipa, con más tiempo, la próxima ola de calor para que el productor pueda revisar las aguadas, entre otras cuestiones.
Feedlot inteligente
Más allá de estas decisiones, Alerta ITH toma medidas por sí mismo poniendo en marcha la aspersión de agua, que es el método más efectivo para mitigar el estrés calórico dentro de los corrales.
«El sistema trabaja los 365 días del año y ya cuando el semáforo está en amarillo, o sea cuando empieza a hacer calor, automáticamente, comienza a abrir los aspersores, que funcionan con una determinada frecuencia para enfriar los animales y el suelo, de modo de reducir la radiación solar indirecta», describió Silveyra, refiriéndose a que no espera a que haya peligro, cuando el ganado ya desmejora su desempeño, funciona de a poco, con menor intensidad que si se estuviera ante un alerta anaranjado. Además, los ciclos son cortos y se van prolongando también en forma automática a medida que aumenta la gravedad del evento.
Un aspecto interesante es que utiliza agua subterránea, fría, que está ahí en el lugar. «Una bomba la lleva por cañería cerrada hacia los aspersores, ubicados en forma colindante entre los corrales. Tienen un rango de disparo de hasta 25 metros, con gota gruesa para que penetre en el pelo del animal sin generar niebla, que no es lo que se busca, ya que aumentaría la humedad ambiental», indicó.
Equipos a medida
Para Silveyra un punto a favor del producto es su versatilidad. «Si el cliente dice: ‘a mí me interesa solamente que la información me llegue al celular’, listo, le vendemos eso. Si plantea: ‘quisiera que además esté vinculado a la bomba, para que se prenda sin tener que depender del personal’, también se lo bridamos. Entonces, nadie se verá obligado a salir con el tanque regador un domingo o feriado», argumentó, aludiendo que algunos establecimientos utilizan la aspersión de agua pero ésta no funciona en forma automática. «El Internet de las cosas ofrece un cambio radical no solo en los procesos sino en la calidad de vida rural», destacó Silveyra.
El sistema se diseña sobre el lugar, a medida. «Hacemos una visita al feedlot, tomamos la dimensión de los corrales, dónde están los tanques de agua, las aguadas, las distancias que deberán cubrir los caños, identificamos los puntos críticos, por dónde deben pasar las tuberías, evaluamos todo», detalló. Y subrayó que «Alerta ITH se adapta a la infraestructura de cada establecimiento, a lo preexistente. No es que hay que generar un proyecto nuevo” .
¿La escala del feedlot? «Se adecua a uno chico, mediano o grande y funciona con batería, no hay problema de abastecimiento eléctrico. Una unidad mínima de instalación, permite atender hasta 6 corrales, con 150 animales cada uno, al unísono; es decir, el sensor es uno solo, lo que cambia son las bombas y los aspersores. «Esto tiene que ver con la cantidad de minutos y el volumen de agua con que se riega cada corral, ya que necesitamos una determinada presión para poder asperjar con la gota óptima», argumentó.
En números
El Ojo del Amo realizó una modelización para un feedlot de 2.000 animales por ciclo estival comparando novillitos engordados con igual dieta, con y sin aplicación de la tecnología Alerta ITH. Para ello, consideraron que el estrés calórico significó una pérdida del 10% en la ganancia de peso diaria y del 20% en la eficiencia de conversión, lo que llevó a prolongar el confinamiento de 138 a 154 días para terminarlos.
La unidad mínima de instalación significa un costo de U$S11 (dólar Banco Nación) por animal, mientras la ventaja por la mejora en los parámetros productivos y la menor cantidad de días de encierre, representa U$S18,6. «La relación costo beneficio es muy buena y el repago de la inversión se hace tras el primer ciclo estival. Además, se puede financiar con la tarjeta AgroNación que brinda seis meses de changüí para hacer el primer desembolso», agregó.
Para finalizar, Silveyra destacó que Alerta ITH ya está funcionando en el feedlot La Filomena, de la familia Buschittari, a 80 km de Rosario. «Ahí tenemos nuestro showroom, con esta y otras innovaciones, que desarrollamos con un equipo multidisciplinario e interinstitucional. Nuestra visión es ser una empresa líder en ganadería inteligente ó 4.0, que facilite al productor la mejora de la eficiencia a campo”, concluyó.
Por: Ing. Agr. Liliana Rosenstein, Editora de Valor Carne
Publicaciòn de «Valor Carne» de fecha 07-01-2021